Un tratado para cambiar 25 millones de vidas

Firma ya para apoyar la campaña 50 for Freedom y ayuda a millones de mujeres, hombres y niños a recuperar su libertad y su dignidad.

¿Qué es el Protocolo sobre trabajo forzoso?

Es un instrumento jurídicamente vinculante que requiere que los gobiernos adopten medidas para luchar contra la esclavitud moderna en todas sus formas. Actúa en tres niveles: prevenir el trabajo forzoso, proteger a las víctimas y garantizar su acceso a la justicia y a la indemnización. Tratándose de un tratado internacional, es necesario que los países lo ratifiquen para que entre en vigor. Una vez ratificado, los países deberán informar regularmente sobre las medidas concretas adoptadas para poner fin a la esclavitud moderna.

“La esclavitud y la civilización no pueden coexistir, porque son contradictorias por naturaleza. Es intolerable, inaceptable y no es negociable. Tenemos que actuar ahora. Todos los países deberían ratificar el Protocolo contra el trabajo forzoso de la OIT”
Kailash Satyarthi, Premio Nobel de la Paz, 2014

¿De qué manera el Protocolo puede prevenir el trabajo forzoso?

Los países que ratifican el Protocolo deberán garantizar que todos los trabajadores en todos los sectores estén protegidos por la legislación. Deberán fortalecer la inspección laboral y otros servicios que protejan a los trabajadores de la explotación. Además, deberán adoptar medidas adicionales para educar e informar a las personas y a las comunidades sobre crímenes como la trata de seres humanos.

“Si queremos producir un cambio significativo en las vidas de las 21 millones de hombres, mujeres y niños víctimas del trabajo forzoso, tenemos que emprender acciones concretas e inmediatas. No es suficiente la indignación, tenemos que hacer realidad el cambio”.
Guy Ryder, Director General de la Organización Internacional del Trabajo

¿Qué prevé el Protocolo para las víctimas?

El Protocolo garantiza a las víctimas el acceso a acciones jurídicas y de reparación, aunque no sean residentes legales del país donde trabajan. También las protege de las sanciones ante cualquier actividad ilícita que hayan sido obligadas a cometer cuando estaban en esclavitud. Los gobiernos tendrán que sancionar las prácticas abusivas y fraudulentas de los contratistas y las agencias de empleo.

¿No existe ya otro tratado sobre trabajo forzoso?

¡Sí! De hecho, la mayoría de los países del mundo han firmado el emblemático Convenio sobre el trabajo forzoso de 1930. Pero desde entonces, han emergido nuevas formas de esclavitud moderna, como la trata de personas, que son aún más difíciles de combatir. El Protocolo sobre trabajo forzoso complementa el Convenio agregando nuevos elementos, como abordar sus causas profundas, de manera que la esclavitud pueda ser eliminada de una vez por todas. Además exige a los empleadores que actúen con la “debida diligencia” para evitar la esclavitud moderna en sus prácticas comerciales o cadenas de aprovisionamiento.

“Es necesario un compromiso claro y activo de todas las empresas para erradicar el trabajo forzoso”.
Roberto Suarez Santos, Secretario General de la Organización Internacional de Empleadores (2014)

En resumen…

El Protocolo sobre el trabajo forzoso no pondrá fin a la esclavitud moderna por sí solo. Pero convencer a los gobiernos a ratificarlo es un paso decisivo en esa dirección. El objetivo inicial de la campaña 50 for Freedom se ha alcanzado con los primeros 50 países que han ratificado el Protocolo. Es hora de que todos los países sigan su ejemplo. Puedes ayudar uniéndote a la campaña y pidiendo a los representantes de tu gobierno que ratifiquen el Protocolo sobre Trabajo Forzoso.

“Creo que la esclavitud moderna es el atentado más ultrajante a los derechos de un individuo. Deberíamos estar indignados, pero la mayoría ignora que 21 millones de personas son víctimas de la esclavitud moderna. Las personas tienen que saber que es una realidad”.
Wagner Moura, Actor, Embajador de buena voluntad de la OIT

¿Dónde puedo obtener más información sobre el Protocolo?

 

Comparte lo que has aprendido