Namibia prosigue su ‘lucha contra el mal’ del trabajo forzoso
6 noviembre 2017
Al ratificar el Protocolo sobre trabajo forzoso, Namibia sigue liberándose del yugo de un pasado de opresión, declaró su ministro de Trabajo
Namibia se convirtió en el cuarto país africano en ratificar el Protocolo sobre trabajo forzoso, y el 21.o a nivel mundial, desde que fue adoptado por mayoría abrumadora en la Conferencia Internacional del Trabajo de 2014.
Durante la ceremonia de ratificación en la sede de la Organización Internacional en Ginebra, Erkki Nghimtina, ministro de Trabajo, puso de manifiesto la determinación de su país de poner fin al trabajo forzoso de una vez por todas.
“El trabajo forzoso era generalizado bajo el dominio colonial y negaba a muchos namibianos su dignidad humana. Liberándose del yugo de este pasado de opresión, Namibia introdujo en su Constitución la prohibición de la esclavitud y el trabajo forzoso y el país prosigue de manera colectiva la lucha contra este mal”, señaló.
“Inmediatamente después de haber obtenido su independencia, Namibia ratificó el Convenio sobre el trabajo forzoso, 1930 (núm. 29) y el Convenio sobre la abolición del trabajo forzoso, 1957 (núm. 105). La ratificación del Protocolo de 2014 relativo al Convenio sobre el trabajo forzoso de 1930 es la continuación lógica de la obligación de Namibia de combatir cualquier forma de trabajo forzoso. La humanidad debe ser servida con humildad, libre de todo tipo de acción impuesta por la fuerza o la coerción a fin de construir El mundo que queremos”, agregó.
Guy Ryder, Director General de la Organización Internacional del Trabajo, celebró esta ratificación “que da testimonio del compromiso de Namibia en la lucha contra el trabajo forzoso. Esta ratificación llega poco después de la publicación de las estimaciones mundiales sobre la esclavitud moderna, que muestran que es urgente adoptar medidas inmediatas y eficaces para erradicar este crimen. El compromiso de Namibia constituye un paso más hacia el objetivo de alcanzar 50 ratificaciones del Protocolo para finales de 2018, como promueve la campaña 50 for Freedom”.
A nivel nacional, Namibia sigue reforzando su legislación y sus instituciones para combatir la trata de seres humanos, en particular a través de la adopción de la Ley n.o 3 sobre el cuidado y la protección de los niños en 2015, que penaliza la trata de niños con fines de explotación laboral y sexual y establece medidas de protección para las víctimas. Namibia además está en el proceso de aprobar una Ley contra la trata de personas, una ley independiente sobre la trata de personas que no sólo penaliza el delito, sino que también contiene disposiciones para la protección de las víctimas y la coordinación de los servicios de apoyo a las víctimas. Además, el gobierno está por poner en práctica un Plan nacional de acción sobre la violencia sexual basada en el género, que contiene una estrategia contra la trata de personas.
El Protocolo refuerza el marco jurídico internacional dirigido a combatir todas las formas de trabajo forzoso, e incluye la servidumbre por deudas, el trabajo doméstico forzoso y la trata de seres humanos, y exhorta a los países a adoptar medidas para prevenir el trabajo forzoso y garantizar su acceso a mecanismos de reparación e indemnización.