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Antigua y Barbuda fortalece su compromiso para hacer frente al trabajo forzoso

2 septiembre 2021

Antigua y Barbuda pasa a ser el 55° país que ratifica el Protocolo de 2014 de la OIT sobre el trabajo forzoso.

Foto: Half Moon Bay, Antigua (© Heatheronhertravels.com)

©lisakristine.com

El 28 de julio de 2021, Antigua y Barbuda ratificó el Protocolo de 2014 de la OIT sobre el trabajo forzoso, y pasó a ser el 55° Estado Miembro de la OIT y el segundo país del Caribe en hacerlo. Al ratificar dicho Protocolo, Antigua y Barbuda ha demostrado su determinación para hacer frente al trabajo forzoso en todas sus formas.

La pandemia de Covid-19 ha afectado de forma muy adversa al mundo del trabajo. Además del riesgo de salud pública que ha provocado, ha puesto en peligro los medios de subsistencia de millones de trabajadores vulnerables y ha aumentado el riesgo de que éstos se vean abocados a una situación de trabajo forzoso. De ahí que revista suma importancia que la observancia de los principios y derechos fundamentales en el trabajo, en particular la erradicación del trabajo forzoso en todas sus formas, constituya el elemento primordial de los esfuerzos encaminados a facilitar la recuperación.

En virtud del citado Protocolo, los Estados Miembros deben adoptar medidas eficaces para evitar el trabajo forzoso, proteger a las víctimas y brindarles acceso a la justicia y a medidas reparadoras, incluida una indemnización. Según estimaciones de la OIT, 25 millones de hombres, mujeres y niños siguen encontrándose en una situación de trabajo forzoso en todo el mundo. Las víctimas son objeto de violencia, amenazas y coacción en varios sectores económicos, en particular en el trabajo doméstico, la construcción, la producción industrial, la agricultura y la pesca.

Esta ratificación constituye la medida más reciente adaptada en el país contra el trabajo forzoso y la trata de seres humanos. Tiene lugar a raíz de la aprobación en 2010 en Antigua y Barbuda de la Ley de Prevención de la Trata de Seres Humanos, en virtud de la cual comenzó a tipificarse como delito la trata de personas con fines de explotación laboral o sexual y a penalizarse con graves sanciones. Al ratificar el Protocolo de la OIT, Antigua y Barbuda redoblará sus esfuerzos para alcanzar la meta 8.7 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible a fin de erradicar el trabajo forzoso, la esclavitud moderna y la trata de seres humanos.