Zimbabwe reafirma su voluntad de erradicar la esclavitud moderna
30 mayo 2019
Zimbabue manifestó su determinación de poner fin a la esclavitud moderna al convertirse en el 32.o país en ratificar el Protocolo sobre trabajo forzoso de la OIT.
El 22 de mayo 2019, Zimbabwe ratificó el Protocolo sobre trabajo forzoso de la OIT, demostrando así su firme compromiso hacia la lucha contra el trabajo forzoso en todas sus formas.
El Protocolo requiere que los países adopten medidas eficaces dirigidas a combatir el trabajo forzoso, incluida la servidumbre por deudas y la trata de personas, a proteger a las víctimas y a garantizarles el acceso a los mecanismos de reparación e indemnización.
“Nos sentimos orgullosos de estar entre los primeros países africanos que han ratificado el Protocolo”, declaró el Embajador Taonga Mushayavanhu, Representante Permanente de Zimbabwe ante las Naciones Unidas en Ginebra. “Con la ratificación del Protocolo, Zimbabwe reafirma su voluntad de erradicar el trabajo forzoso, la esclavitud moderna y la trata de personas. Es un paso muy importante en vista de los desafíos asociados a la migración que el país enfrenta en la región de África Meridional”.
“Me complace mucho recibir este instrumento de ratificación, que una vez más demuestra el compromiso de Zimbabwe a favor de la lucha contra el trabajo forzoso en todas sus formas”, celebró Guy Ryder, Director General de la Organización Internacional del Trabajo. “Esta ratificación es especialmente importante porque las estimaciones mundiales de la OIT muestran la urgencia de adoptar medidas inmediatas y eficaces para erradicar el trabajo forzoso y la trata de personas. Además, constituye un paso fundamental hacia el objetivo de alcanzar 50 ratificaciones para finales de 2019. La ratificación del Protocolo reviste un significado especial en el año en que la OIT celebra sus 100 años, ya que el Protocolo es parte de la Campaña de ratificación del Centenario de la OIT “Uno cada uno” lanzada por la Oficina Internacional del Trabajo.
A nivel nacional, Zimbabwe ha fortalecido su marco institucional y jurídico para combatir todas las formas de trabajo forzoso, en particular al adoptar la Ley contra la trata de personas de 2014, que abarca la explotación sexual, la servidumbre por deudas, el trabajo forzoso y otras formas de servidumbre. Además, estableció un Comité Interministerial contra la trata de seres humanos.
Según estimaciones globales, hay 24,9 millones de personas víctimas del trabajo forzoso en el mundo, de las cuales 4,8 millones son víctimas de la explotación sexual. En el sector privado, el trabajo forzoso genera 150.000 mil millones de dólares anuales en ganancias ilícitas. Diversos sectores económicos se ven afectados, en particular el trabajo doméstico, la construcción, la industria manufacturera y la pesca.